Yo, comprometida. Él, casado
Después de estar viviendo esto, me doy cuenta, que el amor no tiene límites. El amor es Ciego…Infinito.
Lo conocí por asuntos laborales. Yo, comprometida. El, casado. Aunque no lo sabía. Nunca mostré interés en conocerlo más profundamente.
Es una de estas personas que te caen bien, pero nada más. Nos conocimos en el año 2006, cuando comenzaba mi nuevo trabajo.
Ni recuerdo bien cuando fue exactamente. El es… especial, fuera de todo. Es una persona que alegra el día, siempre esta sonriendo, y pocas cosas le causan tristeza. Recuerdo haber tenido días malos, y haberlos mejorado por chocar con esa sonrisa.
En el año 2007, todo transcurrió normal. Me casé en octubre. El iba a la oficina por diferentes asuntos con mi jefe, y no pasábamos más que las palabras necesarias.
Para comienzos del 2008, me llego un mail, que detallaba el maltrato con los animales, y fue uno de los pocos mails que les di forward. Tenía su mail agregado en los contactos, pero no en Messenger. Era un email sencillo, se lo mande a un grupo de personas. Y adivinen: me respondió el mail, diciéndome que le daban pena los animalitos, etc. yo le devolví el mail preguntándole que si el era así de sentimental con los animales, porque yo lo soy.
El responde de nuevo, y me dice que sí, que llora hasta con las películas. (jaja). bueno, le dije entonces que le iba a regalar una película que me encanta, para que se pusiera melancólico. Me agrego a Messenger en ese momento, y nos pusimos a hablar por allí. Ahí me dijo que iba a venir a buscar la peli, al otro día.
Y vino. y nada, hablamos normal, todo bien, me ayudo con algo en la PC, pero nada diferente. después de aquella conversación del día anterior, comenzamos a hablar más a menudo. normalmente yo nada mas lo llamaba para asuntos laborales, y eran las únicas veces que hablábamos. por MSN, hablábamos de todo.
Un día, hace como un mes, llegamos al tema de los dulces. yo acababa de comerme un cheesecake, y el comenzó a decirme que le encantaba. entonces me dice:
“Te voy a comprar el cheesecake mas delicioso que hayas probado.” sonaba como una idea aérea, poco real. Yo, para seguir la corriente, seguí el tema, y le dije que me lo trajera.
El me responde: ¿por qué mejor no nos juntamos hoy en la noche, y hacemos una degustación de dulces? Acepté, y nada, intercambiamos celulares, yo ya tenía el suyo, y quedamos de vernos esa noche.
Nos juntamos en el parqueo de una de las plazas de la ciudad, allí deje mi carro, y nos fuimos en el suyo. me ve, me dice lo bella que estoy, bla, bla, lo típico que le dicen a las mujeres. Salimos, ni sabíamos donde íbamos, y terminamos en la playa. Nos sentamos con nuestros dulces, a probarlos, a reírnos, y a hablar muchísimo. En momentos determinados nos quedábamos mirándonos, como extraños por aquella situación tan inocente. Yo, no pude abstenerme a decirle lo cautivadora que es su mirada. tiene los ojos verdes. Pero que ojos. en uno de esos momentos, el se me acerca y me da un beso en la frente. Ya yo me encontraba con los nervios de punta.
Paso la noche, y regresamos a la ciudad, volvimos a buscar mi carro, y nada. ahí quedo todo. Al otro día, hablamos, y el se ofreció a llevarme a casa, porque no andaba manejando. a la hora de salida, me espero en el parqueo, y nos fuimos. me dejo en casa, y se fue. como a la hora y media, lo llamo, a ver que hace, y me dice que esta cerca de mi casa aun, haciendo unos asuntos. yo, que iba de salida a resolver unas cosas, le digo que nos juntemos un momento. fijamos un lugar, y allí fuimos. llegue, el se estacionó, y yo detrás de el. me desmonté, y me monte en su vehículo. Ni bien hice entrar, y el me tomó, y me regaló tremendo beso. Nunca pensé, que iba a besar tan perfecto. Yo me quedé sin palabras, Muda, y no pude negarme a aquella maravilla. no supe que mas decirle, mas que me tenia que ir, pero el no me quería dejar ir, y me retenía cada vez mas.
me fui apartando, hasta que me despedí, me monte en el carro, y me fui. el salio detrás de mi, y me llamó. yo aun no sabia que decirle. De momento, me arriesgué, le dije que se parara, me orillé. el se desmontó del carro, y se acercó a mi ventana… y me otorgó un beso más.
Ahí comienza nuestro intercambio de deseos, de sentimientos. el lunes siguiente a esa semana, me sorprendió llevándome a un lugar maravilloso. donde éramos dueños de todo.
Ahí fue nuestro primer momento… en que nos unimos sin excusas. Hicimos el amor por primera vez; yo, con mis dudas, él, totalmente decidido. Fue perfecto, como cada momento juntos. Era como si nuestros cuerpos se manejaran solos, y se entendían perfectamente. De ahí en adelante, no hemos podido parar. y mientras más pasan los días, reconozco, que todo es un mundo aparte. es real, pero solo tenemos conocimiento de todo el y yo. Es nuestro mundo, nuestra maravilla.
Y cada día que pasa, me da más miedo. Porque todo es tan perfecto, que quisiera quedarme mirándolo por siempre. Me enamoro. de algo que puedo obtener cuando desee, pero no de la manera que comienzo a querer. Mientras, me mantengo tratando de controlar mis sentimientos, para no sufrir. Pero todo es perfecto. Los roces, Los besos. El y yo.
(Anónimo)